Montserrat Guàrdia Güell toma posesión como presidenta del Consejo Social de la UPC
La ingeniera y ejecutiva Montserrat Guardia, primera mujer en presidir el Consejo Social de la UPC, el órgano de representación de la sociedad en la Universidad
El Consejo Social es el órgano de participación de la sociedad en la Universidad y colabora con el equipo de gobierno en la definición de los criterios y prioridades de su planificación estratégica.
Formado por representantes del mundo social y económico así como por seis miembros del Consejo de Gobierno de la Universidad, tiene como función asumir, integrar y relacionar la actividad de la UPC con el sector público, la sociedad civil y el tejido productivo. También tiene encomendadas importantes funciones en materia económica, como la aprobación del presupuesto de la Universidad, así como velar por la calidad y mejora de los servicios, la eficacia de la gestión y la financiación de la institución.
Entre otras actividades, impulsa diversas iniciativas y convoca varios premios que distinguen la calidad en la docencia, valorización de la investigación, la investigación tecnológica, el compromiso social, la gestión universitaria y la creación literaria en el género de la ciencia ficción.
El presidente o presidenta es nombrado o nombrada por acuerdo del Gobierno de la Generalitat por un mandato de cuatro años, renovable por un único período de la misma duración
El 28 de abril ha tenido lugar la toma de posesión de la ingeniera y ejecutiva Montserrat Guardia como presidenta del Consejo Social de la UPC, después de que el Gobierno de la Generalitat de Cataluña acordara nombrarla en el cargo. Con este nombramiento, Montserrat Guardia se convierte en la primera mujer en ponerse al frente del Consejo Social, presidido los últimos ocho años por Ramon Carbonell Santacana.
03/05/2022
Ingeniera Superior de Telecomunicaciones, titulada en la Escuela de Telecomunicación de Barcelona (ETSETB) por la Universitat Politènica de Catalunya· BarcelonaTech (UPC), máster en Gestión de Proyectos y Servicios de Tecnologías de la Información (Universitat Ramon Llull) y máster en Dirección de Empresas y Servicios de Tecnologías de la Información (Universitat Pompeu Fabra), la barcelonesa Montserrat Guàrdia i Güell ha tomado posesión, el 28 de abril, en Barcelona, del cargo de presidenta del Consell Social de la UPC. El acto, que ha tenido lugar al Rectorado de la UPC, ha contado con la presencia de la consejera de Investigación y Universidades de la Generalitat de Cataluña, Gemma Geis; del rector de la UPC, Daniel Crespo y del ingeniero y empresario Ramon Carbonell, que ya ha agotado su segundo mandato como presidente de este órgano de participación de la sociedad en la Universidad.
El nombramiento de Montserrat Guàrdia, acordado por la Generalitat de Cataluña y publicado en el Diario Oficial de la Generalitat de Cataluña (DOGC) el 21 de abril, significa la llegada de la primera mujer en la presidencia del Consejo Social de la UPC, constituido en diciembre del 1985 como órgano de representación de la sociedad en la Universidad.
Con más de 24 años de experiencia en la dirección de áreas de tecnologías de la información y operaciones, actualmente es la directora ejecutiva de la empresa Big Onion, de la que también es co-fundadora, dedicada a proyectos estratégicos vinculados con la innovación, la digitalización y la tecnología.
Es especialista en estrategia y creación de ecosistemas y en gestión de proyectos innovadores de gran escala, especialmente en aquellos que se basan en la aplicación y uso de las tecnologías de la información de última generación, como por ejemplo las tecnologías de registro descentralizadas (Blockchain) y su convergencia con la inteligencia artificial o el internet de las cosas. Unos proyectos a los cuales aporta una visión humanista y que están enfocados a la creación o adaptación de modelos de negocio de impacto social que permitan conseguir los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible formulados por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para el 2030.
Anteriormente, ha dirigido proyectos de transformación operacional y de lanzamiento de nuevos negocios para compañías multinacionales en ámbitos que van desde la consultoría y los sistemas de información a la banca y los seguros, pasando por los servicios para la industria del petróleo y gas, en los últimos diez años, ha trabajado firmemente al construir puentes entre varias start-up y organizaciones internacionales.
También ha sido responsable de los servicios de tecnologías de la información en cuatro juegos olímpicos, copas del mundo, juegos panamericanos y otros campeonatos internacionales, así como en cumbres de la ONU.
Su trayectoria profesional la ha llevado a liderar equipos multidisciplinarios y multiculturales con gran experiencia tecnológica y con competencias emprendedoras, a la vez que a vivir y adoptar la riqueza cultural de diferentes países de Europa y de Norteamérica y Suramérica, así como del Japón, Corea del Norte y del Sur, Suráfrica, India, Malasia y los Emiratos Árabes.
Actualmente también es presidenta de la Quantum Blockchain Alliance y miembro del Consejo Asesor del Observatorio de Ética en Inteligencia Artificial de Cataluña (OEIAC), entre otras entidades. Igualmente contribuye en programas de innovación social y es profesora visitante en varias universidades y escuelas de Negocio.
Ha sido directora general y vicepresidenta y miembro del equipo fundador del Consorcio en Blockchain Alastria, una asociación sin ánimo de lucro creada al 2017 y que ha acontecido un referente internacional por su carácter pionero e innovador y por ser un motor de impulso en la economía digital descentralizada a través de las tecnologías Blockchain y de normativas jurídicas legales y éticas.
En su discurso de toma de posesión, la nueva presidenta ha expresado su agradecimiento y compromiso con la UPC para trabajar, con el rector y todo el Consejo, al potenciar cuatro pilares estratégicos: la internacionalización; la capacidad de innovación conjuntamente con las empresas; el refuerzo para aproximar la UPC a los jóvenes entre los 15 y 17 años y, en general, a los “jóvenes de espíritu” de todas las edades. El cuarto pilar es el refuerzo y la creación de los puentes institucionales necesarios, fomentando el trabajo armónico del conjunto de la sociedad civil, para que la Universidad sea una parte muy activa del impulso económico y social.