La Universitat Politècnica de Catalunya - BarcelonaTech (UPC) cerrará el ejercicio del año 2024 habiendo liquidado la deuda de casi 100 millones de euros para la financiación de inversiones en infraestructuras y proyectos, y para la adquisición de equipamiento científico-tecnológico para el desarrollo de actividades de I+D+i.

Esta operación ha sido posible gracias a que, entre los años 2016 y 2021, se ha asumido una mayor carga de devoluciones al coincidir las amortizaciones y los aplazamientos de la gran mayoría de préstamos pendientes. De hecho, del 2019 al 2024, la UPC ha devuelto un 46% de la deuda acumulada, que supone un total de 45,3 millones de euros. Además, desde el 2022, en la medida que ha habido disponibilidad presupuestaria, se han amortizado anticipadamente cuotas por valor de 6,6 millones de euros para reducir el gasto a pagar en concepto de intereses.

Con la liquidación de la deuda en el cierre de 2024, se liberarán recursos que se podrán destinar a políticas universitarias, tal como se prevé recoger en el presupuesto de la UPC para el 2025, que se presentará a finales de año.

Una deuda que se remonta al 2000
Los conocidos como ‘parquetazos’ se otorgaron entre los años 2000 y 2014 en convocatorias ministeriales a las cuales concurrieron las universidades para la financiación de inversiones en infraestructuras y la adquisición de equipamiento científico-tecnológico. Una parte de esta financiación se recibió en forma de préstamos a través de líneas de crédito, algunas convocatorias con cofinanciación FEDER y, en el caso de alguna convocatoria, con el compromiso de la Generalitat de Catalunya de financiar el retorno de los préstamos, un compromiso que no se llegó a materializar nunca.

A lo largo de las convocatorias, la UPC subscribió préstamos por 98,2 millones de euros, importe que se incrementó hasta los 98,9 millones de euros al sumar los intereses por los años de carencia. El gasto financiero de los intereses de los préstamos ha estado de 1,7 millones de euros. La crisis económica y las dificultades de pago de las universidades incrementaron los costes financieros de estos préstamos como consecuencia del aplazamiento del pago de las amortizaciones a 2-3 años.

La UPC utilizó esta financiación en la construcción de varias infraestructuras y equipamientos científicos: el edificio Neàpolis, centro tecnológico de Vilanova i la Geltrú; el Centro Tecnológico de Manresa (CTM); la ampliación del edificio de la Facultad de Matemáticas y Estadística para acoger el Centro de Diseño de Equipos Industriales (CDEI), el Instituto de Robótica e informática Industrial (IRI) y la Fundación CUMBRE; el edificio RDIT, en el Campus del Baix Llobregat, en Castelldefels; la contribución a las infraestructuras del Campus Diagonal-Besòs, y el edificio NESGA y la sede del Centro Tecnológico de Transferencia de Calor (CTTC), en el Campus de Terrassa.

Entre los años 2016 y 2020, la UPC tuvo que incrementar su capacidad de devolución, al coincidir las amortizaciones y aplazamientos de la gran mayoría de préstamos pendientes. Así, entre estos años se amortizaron 41,5 millones de euros (un 46,3% de la deuda). Del 2021 a 2024 se han devuelto 22,6 millones de euros, es decir, el 25% restante de la deuda. En este periodo, en la medida que ha habido disponibilidad presupuestaria, se han amortizado anticipadamente cuotas por 6,6 millones de euros para reducir el gasto a pagar en intereses.

El siguiente gráfico muestra la evolución de los importes devueltos y la deuda viva al inicio de cada año: